martes, 28 de noviembre de 2006

Trabajo manual

Complemento del postal anterior: el trabajo manual es el gran forjador de la veracidad. Con las palabras puedes engañar; con la materia no: te impone su ruda veracidad. Si deseas ensamblar dos tablas, o usas perfectamente bien tu herramienta de corte o el ensamble no resulta. Con la materia la maestría no es agregado: es requisito previo.

2 comentarios:

  1. Muy buena observación que por obvia en muchas ocasiones se pierde,como casi todos los principios básicos.La realidad como la materia es terca
    saludos

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  2. Gracias, Max. He querido subrayar dos cosas: el valor educativo del trabajo manual en los programas de enseñanza; y la conveniencia de incorporarlo a lo largo de nuestra vida como una actividad frecuente. Saludos. Gonzalo.

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